Este es Jerry

Alguna vez les he contado de Jerry? Claro, ligeramente, en Mayo del 2005 lo conocí. Pero en realidad nunca les conté lo que sucedió (indirectamente, por supuesto que sí, pero tienen que buscarlo).

Al menos 3 veces por semana entro en el blog de Jerry para ver sus nuevos relatos o para leer los antiguos, recordar los no tan lejanos y tratar de entenderlo. Tanto así, que decidí ponerlo en mis links porque era demasiado rollo entrar al blog de mi hermano para luego ir al de él.

En ese momento sentí como si un poco de la distancia desapareciera. Pero no, en realidad sigue y se hace más grande cada segundo.

Lo tengo en mi Messenger, pero ya nunca contesta. En realidad no tengo idea por qué, según recuerdo platicábamos muy bien y era entretenido. Quizá dejó de serlo para él.

Pero es que las cosas así suceden ahora. Por el Internet te enteras de la vida de alguien, de los detalles que hacen especiales sus días, de la manera en que piensa esa persona. Hasta cierto punto puedes decir que LA CONOCES… pero eso es mentira. Una triste mentira. Esto es básicamente porque esta persona es parte de tu vida, pero tú no existes la de ella. De hecho, si no apareces en su blog, entonces no existes, no eres relevante, no eres nada.

Es sentirte ligado a alguien que no está ligado a ti de ninguna manera.

Tuve la oportunidad de conocer a Jerry en la vida real. Unos breves segundos primero, aquel día que sucedió lo que nunca les conté. Esa noche cuando lo saludé diciendo “Eres una mujer muy atractiva!” mientras casi saltaba de emoción como pequeña de 5 años frente a Santa Claus… Sí, lo sé, qué raro saludo para un hombre al que no conoces… pero no puedo explicar lo que cruzó por mi mente en esos momentos. Lo más coherente al respecto es que un día mi hermano me pasó una foto de él para que lo conociera y; para divertirme, lo convertí en mujer con el Photoshop.

Pero ese no fue el fin. Hace más o menos 1 año lo volví a ver cuando fue su graduación. Pasé muy pocas horas con él, pero esas horas se prendieron de mi mente y nunca se han ido. Jamás se irán, supongo. Y muy seguido me pregunto por qué vivirá tan lejos, por qué no soy como a él le gustan las shikas y; lo más importante, por qué me preocupo tanto por las dos cuestiones anteriores.

Cómo me gustó cuando Jerry hablaba, cuando me explicaba cosas, cuando reía, cuando me hacía reír y filosofar! Cuando pensé que si viviera en Monterrey crearía para él deliciosos postres y entonces dejara de ser un flaquito!

Ese es Jerry, de quien escribo en mi blog porque él sí existe y sí es relevante. Jerry, a quien creo conocer pero que en la realidad es sólo “el amigo de mi hermano”. Con quien no envejeceré para juntos ver un DVD y salir a regañar a los niños que hacen mucho ruido mientras juegan en la calle...



P.D. 3 posts hoy! Wow, sí que tengo ganas de decir cosas... o sólo porque son las 3:30 am???